Necesidades
Lo de las necesidades es una cosa curiosa.
¿Están ahí? ¿Se crean? ¿Las creamos?
Mi opinión me la guardo. Lo que sí se es que yo no sabía que necesitaba tanto a Rubén González como en realidad ha sido.
Y es hace muy poquito me dejaron un disco de Rubén González llamado Chanchullo, dentro del sello de Buena Vista Social Club, que me está dejando traspuesto. Literalmente.
Rubén González es el pianista de la mencionada formación del Buena Vista. Pero a diferencia de los discos que han ido surgiendo a raiz de tan memorable resucitamiento que fue la peli y/o el disco, este musicazo pone una pierna en la descarga más salsera al estilo más Fania, más Tito Puente o Baretto, la otra la deja en el son más agarrao, una mano se incorpora al jazz latino, o latin jazz, y la otra hace lo que quiere. Y eso es lo que tiene beber de muchas fuentes, o tener inquietudes y ser un gran instrumentista.
Y yo, que ante encrucijadas que, como sabéis cambian el resto de tu vida, en función de si tomas el camino de la derecha, el de la izquierda, te dejas llevar hacia adelante, o vas hacia atrás, me quedo sentado en el cruce, fumándome lo que haya, viendo la vida, y relajándome. Por eso quizás, al no ser pureta, y poco cobarde, me gustan estos músicos que beben, mezclan, y te sirven un combinado riquísimo, que lo mismo sabe a madera, que a fruta, que a amargor.
Y por eso Rubén González que lejos, lejísimos de quedarse en el son cubano, o en el danzón cubano, o en la propia habanera, se va, vuelve, se mete y se sale - aunque en realidad, no se si por cobarde (como yo) o por investigador (como él) -, para introducirnos en el mundo latino. ¡Y como suena la trompeta cuando se mete en el silencio!
Bueno, y yo que me voy pa Nuolins' en una 9 días, que aunque parezcan pocos, cada día parece un año. En fin
Y aunque toméis un camino u otro, u os quedéis en la encrucijada a mi lado, disfrutad de la música, que es lo mejor del mundo. Lo mejor.
Ya hablaremos.
¿Están ahí? ¿Se crean? ¿Las creamos?
Mi opinión me la guardo. Lo que sí se es que yo no sabía que necesitaba tanto a Rubén González como en realidad ha sido.
Y es hace muy poquito me dejaron un disco de Rubén González llamado Chanchullo, dentro del sello de Buena Vista Social Club, que me está dejando traspuesto. Literalmente.
Rubén González es el pianista de la mencionada formación del Buena Vista. Pero a diferencia de los discos que han ido surgiendo a raiz de tan memorable resucitamiento que fue la peli y/o el disco, este musicazo pone una pierna en la descarga más salsera al estilo más Fania, más Tito Puente o Baretto, la otra la deja en el son más agarrao, una mano se incorpora al jazz latino, o latin jazz, y la otra hace lo que quiere. Y eso es lo que tiene beber de muchas fuentes, o tener inquietudes y ser un gran instrumentista.
Y yo, que ante encrucijadas que, como sabéis cambian el resto de tu vida, en función de si tomas el camino de la derecha, el de la izquierda, te dejas llevar hacia adelante, o vas hacia atrás, me quedo sentado en el cruce, fumándome lo que haya, viendo la vida, y relajándome. Por eso quizás, al no ser pureta, y poco cobarde, me gustan estos músicos que beben, mezclan, y te sirven un combinado riquísimo, que lo mismo sabe a madera, que a fruta, que a amargor.
Y por eso Rubén González que lejos, lejísimos de quedarse en el son cubano, o en el danzón cubano, o en la propia habanera, se va, vuelve, se mete y se sale - aunque en realidad, no se si por cobarde (como yo) o por investigador (como él) -, para introducirnos en el mundo latino. ¡Y como suena la trompeta cuando se mete en el silencio!
Bueno, y yo que me voy pa Nuolins' en una 9 días, que aunque parezcan pocos, cada día parece un año. En fin
Y aunque toméis un camino u otro, u os quedéis en la encrucijada a mi lado, disfrutad de la música, que es lo mejor del mundo. Lo mejor.
Ya hablaremos.
3 Comments:
Es sabroso estar en la encrucijada (sea la que sea, aunque esto depende) si es acompañado por pedazos de músicos como Rubén.
Y buenos caminos tenga usted, que siempre que marcha hacia Nuolins, siento una envidia que casi alcanza lo malsano.
Claro, que luego se apacigua esperando comentarios.
Gracias por tus buenos sentimientos. Intentaré dar buena cuenta de todo lo que, musicalmente, acontezca, a ver si esas envidias se transforman en realidades algún año; nada me gustaría más que algunos de los que por aquí pasáis os vinierais alguna vez. Ese será el momento de constituir la agencia de viajes musicales Boogaloo Corner.
Un abrazo, y gracias.
Turismo musical me suena muy bien... mejor que el futbolero de ir a argentina... si allá los conciertos son tan baratos!... y el blues argentino es buenísimo...
El post me empuja a escuchar el disco... es como tentar al lector... voy a revisar los discos de son cubano que tengo para ver si sale algo interesante... son muchos y no los he escuchado todos...
Saludos!
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