Celofunk
Hace un par de fines de semana estuvieron en Madrid un par de amigos de fuera. Uno de ellos, Jeremy, es el tio que más sabe de música que yo haya conocido nunca. El tio es el manager de Tipitina's. Bueno, pues Andrew y él estuvieron por aquí, y yo claro, les tenía que sacar a algo bueno musicalmente hablando.
Aquel fin de semana tocaba una banda que yo no había visto nunca, Celofunk, pero que se ve que llevan tocando toda la vida por aquí. Y yo había oído algunas referencias, como el hecho de que acaban de grabar para VampiSoul.
El caso es que nos retrasamos unos diez minutos sobre la hora prevista de comienzo de concierto, y en El Junco, ya no cabía ni un alfiler, de hecho había una cola increible, para Madrid, para música en directo en Madrid quiero decir... A lo mejor es que estoy acostumbrado a que no haya nadie viendo a Jambandlaya nunca... No se. No pudimos ver música en directo, porque el BoguiJazz estaba también a reventar.
Jeremy me decía que no preocupara, que ve música todos los días del año. Ya pero a mi me jodió.
Y con esa espinita me compré el disco de Celofunk (creo que sólo tienen uno) a través de la web de VampiSoul.
El disco es un recorrido por el funk más clásico, negro, asoulado, que yo haya oído nunca en este país. Como influencias todos los grande, estre los que están los Meters, claro. Dos cantantes en la formación, dos cantantes que más de una deberían escuchar para que se dieran cuenta lo que es entender, escuchar y transmitir. En fin.
El hammond se escucha perfectamente, la única guitarra ocupa su lugar- no es que respire, es que le da caladas profundas al canuto musical que se está fumando -, y el saxo acompaña a la guitarra, aunque forma parte de la sección de vientos, cuando esta arregla.
Aunque hay temas suenan al funk que estamos acostumbrados por aquí: Alcohol Jazz, Fundación Tony Manero, y un poquito a Carlos Coupé, el resto es súper negro, y poco cercanos al Boogaloo, y más arrimados al soul bestia y negro de los 60. De hecho me recuerdan a veces a Sharon Jones.
Y además el disco tiene sorpresa incluida: al trombón Santiago Cañada. De La Brassa. Y es yo conozco bastante a estos de La Brassa, una de las pocas brass bands que hay en Madrid, por no decir la única. Y es que el sábado estuve con mis hijas y unos amigos viendo en la Plaza de Santa Ana a La Brassa tocar en la calle. Un plan muy agradable la verdad.
Y Agustín, el saxo de la Brassa, al hablarle de Celofunk, me dijo que ellos ya habían tocado con esta banda de funk varias veces. Y ahí está, en el disco el pequeño de los Cañada. Al trombón. Que bien.
Ya hablaremos
Aquel fin de semana tocaba una banda que yo no había visto nunca, Celofunk, pero que se ve que llevan tocando toda la vida por aquí. Y yo había oído algunas referencias, como el hecho de que acaban de grabar para VampiSoul.
El caso es que nos retrasamos unos diez minutos sobre la hora prevista de comienzo de concierto, y en El Junco, ya no cabía ni un alfiler, de hecho había una cola increible, para Madrid, para música en directo en Madrid quiero decir... A lo mejor es que estoy acostumbrado a que no haya nadie viendo a Jambandlaya nunca... No se. No pudimos ver música en directo, porque el BoguiJazz estaba también a reventar.
Jeremy me decía que no preocupara, que ve música todos los días del año. Ya pero a mi me jodió.
Y con esa espinita me compré el disco de Celofunk (creo que sólo tienen uno) a través de la web de VampiSoul.
El disco es un recorrido por el funk más clásico, negro, asoulado, que yo haya oído nunca en este país. Como influencias todos los grande, estre los que están los Meters, claro. Dos cantantes en la formación, dos cantantes que más de una deberían escuchar para que se dieran cuenta lo que es entender, escuchar y transmitir. En fin.
El hammond se escucha perfectamente, la única guitarra ocupa su lugar- no es que respire, es que le da caladas profundas al canuto musical que se está fumando -, y el saxo acompaña a la guitarra, aunque forma parte de la sección de vientos, cuando esta arregla.
Aunque hay temas suenan al funk que estamos acostumbrados por aquí: Alcohol Jazz, Fundación Tony Manero, y un poquito a Carlos Coupé, el resto es súper negro, y poco cercanos al Boogaloo, y más arrimados al soul bestia y negro de los 60. De hecho me recuerdan a veces a Sharon Jones.
Y además el disco tiene sorpresa incluida: al trombón Santiago Cañada. De La Brassa. Y es yo conozco bastante a estos de La Brassa, una de las pocas brass bands que hay en Madrid, por no decir la única. Y es que el sábado estuve con mis hijas y unos amigos viendo en la Plaza de Santa Ana a La Brassa tocar en la calle. Un plan muy agradable la verdad.
Y Agustín, el saxo de la Brassa, al hablarle de Celofunk, me dijo que ellos ya habían tocado con esta banda de funk varias veces. Y ahí está, en el disco el pequeño de los Cañada. Al trombón. Que bien.
Ya hablaremos
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