Gafas

A mi, tocando, se me caen las gafas sobre la punta de la nariz, y hacen equilibrio ahí, en la punta.
A mi eso no me molesta.
En cualquier caso no han dejado de hacerme notar lo poco sexy que es eso.
A mi eso sí me molesta. Bueno no mucho en realidad. Solo un poco. Poquito.
De todas formas es inevitable tener las gafas casi siempre caídas sobre la nariz, mientras tocas, estando en otro planeta..., es que no puedes estar en todo.

A Stanton Moore también se le caen las gafas cuando toca. Lo que no se es si le hacen notar lo poco sexy que eso. A lo mejor es que él es sexy en cualquier caso. A lo mejor es que como toca tan bien, lo de las gafas y tal es lo de menos. No se.

Estoy escuchando ahora mismo un concierto que me he bajado de Stanton Moore en el Lincoln Center de New York - lo voy a repetir: M-E-L-O-H-E-B-A-J-A-D-O. Me lo he bajado de Archive.org. A ver si los de la SGAE se dan por enterados, ya que me gustaría comprobar quien ha comprado más discos en las tiendas, si Tedy (no se como cojones se escribe) Bautista o yo. No te jode.

A Stanton Moore se le caen las gafas mientras toca.
Uno de los conciertos que más me gustaron en los que vi a Stanton Moore, fue una Jam que se organizó en un sitio llamado Blue Nile. La Jam se llamaba Dragon Smoke.
En aquel concierto había un tio con pedazo de micros, y una súper grabadora. Sí, grabando el concierto. Esto está permitido por los músicos allí en New Orleans. ¿Porqué?
Pues porque lo que pasa en las jams es irrepetible, y descubre a nuevos músicos, nuevas bandas. Y esto lleva a: uno, que quieras ir a sus conciertos y pagues el ticket, y dos, que te compres sus discos. Desarrollo de la música, los intérpretes, y los compositores.
Bueno, yo me acerque al tio este de los micros y me comentó que lo iba a poner en archive.org. Mientras lo pone me he descargado un concierto de Stanton Moore en el Lincoln Center en New York, que me viene vía Andrew. Y por otro lado he hecho un par de búsquedas - Ivan Neville -, y he encontrado cosas tan sorprendentes como una banda llamada Soulive, con John Scofield. Y una reunión (summit) de Hammonds y pianos en Tipitinas, con John Gros entre otros. Y una jam con los Papa Grows Funk... Me los voy a ir bajando. Ya os diré.

A Stanton Moore se le caen las gafas, y mientras toca se las vuelve a subir, como yo, lo de subirselas, no lo de tocar, digo.
Stanton Moore toca fuerte, muy fuerte, pero quiere tocar más fuerte y por eso, mientras no deja de tocar, se levanta de su silla, para, desde arriba, darle más fuerte al bombo, que os aseguro que se te mete hasta la gargante, desde los pies.
Stanton Moore toca mucho, oye mucho, y sabe mucho. Los tres muchos de música. Eso hace que cuando está acompañando a otro músico en su solo, sea tremendamente intuitivo, y sepa hacia donde podría evolucionar, y cuando el músico, ya picado, claro, le sorprende, el tio disfruta todavía más y se ría, se le caigan las gafas de nuevo, y se las vuelta a subir, todo ello, con una gran sonrisa en la boca, y sin dejar de tocar. Espectacular.

Yo quiero recomendar dos discos de Stanton Moore.



Este es el último, y es absolutamente descriptivo de lo jammy que puede ser un concierto de este tio. No tiene desperdicio, y es bastante dificil de describir lo que hace, ya que está cercano al funk, al jazz, ... Merece la pena escucharlo.




Este otro es una banda sonora de una peli que no he visto, francesa, acompañado de una formación llamada Garage A Trois, en la que milita por ejemplo Charlie Hunter, el gran guitarrista innovador que suele grabar, y mucho, para Blue Note. Más dificil este disco, más jazzero, más moderno. Merece la pena escucharlo.

Mientras acabo este post, sigo escuchando el concierto de Stanton Moore en el Lincoln Center de New York, y la música me traslada al Blue Nile, a New Orleans. Está muy bien esto que hace la música conmigo.

Ya hablaremos.